Mostrando entradas con la etiqueta amor. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta amor. Mostrar todas las entradas

viernes, 14 de febrero de 2025

martes, 28 de enero de 2025

ADN: #TodosSomosUno

 







Cuando se descubrió que en las espirales del ADN se encontraba la información que determina las características básicas de cada especie, comprendimos que los rasgos externos de los seres vivos se transfieren de generación en generación y son inmutables. Un árbol de aguacates siempre dará aguacates, y nuestros hijos heredarán parte de nosotros, combinando los ADN de sus padres. Esta realidad nos llena de satisfacción, pero también nos invita a reflexionar.

Aunque el ADN no se puede cambiar, lo que sí podemos modificar son los rasgos que dependen de nuestra educación, creencias y formas de pensar. En la Biblia se afirma que somos hechos a imagen y semejanza de Dios. Esto implica que somos hijos de la Fuente, del Creador, y que heredamos cualidades divinas como el amor, la bondad, el perdón, la compasión y el deseo de felicidad. Estas cualidades están en todos nosotros, esperando ser desarrolladas a través de nuestras decisiones.

El mundo que habitamos nace de nuestros pensamientos y deseos. Todo lo que vemos –nuestra casa, nuestras ciudades, incluso el universo– fue primero concebido en la mente. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿en la mente de quién existimos nosotros? Si todos provenimos de la misma Fuente, debemos recordar que en ella solo habitan la belleza, el amor y la bondad. Así como podemos mejorar nuestras habilidades a través del esfuerzo y la práctica, también podemos cambiar nuestra forma de pensar y de percibirnos, avanzando hacia la plenitud.

Es crucial cuidar nuestros corazones y pensamientos, porque de ellos nace nuestro destino. Este destino dependerá de la cantidad de amor que albergue nuestro corazón. Desde mi fe, el corazón tiene dimensiones sagradas, y una de ellas es el amor al prójimo. Este amor nace de creer que todos somos hijos de la misma Fuente, lo que algunos llamamos Dios.

Hoy, con el desarrollo de las comunicaciones, estamos más conectados que nunca. Se nos presenta una oportunidad única para superar las diferencias culturales, políticas, económicas, religiosas y étnicas que han sido promovidas por quienes desean un mundo separado. La ciencia misma nos demuestra que la separación no tiene base lógica: Todos Somos Uno. Compartimos el deseo de ser felices, de realizarnos y de alcanzar la plenitud.

Sin embargo, los mitos y mentiras contra las personas inmigrantes persisten. Se les culpa injustamente de saturar los servicios sociales, de aumentar la violencia o de ser una carga para la sociedad. Pero la verdad es otra:

  • Los inmigrantes no roban empleos. Muchos ocupan trabajos esenciales que otros no quieren realizar, como la construcción, la recolección agrícola o los servicios domésticos. Además, aportan a la economía mediante el pago de impuestos.
  • No saturan los servicios de salud. Aunque aumentan la población en ciertas zonas, también contribuyen económicamente, justificando mejoras en los sistemas de salud y educación que benefician a todos.
  • No incrementan la violencia. Los problemas como el narcotráfico o la violencia machista son flagelos globales que responden a desigualdades estructurales, no a la migración.

Las barreras físicas y mentales que nos separan no nacieron de nuestra esencia, sino de los intereses de quienes desean dividirnos. Históricamente, las fronteras se crearon para controlar y dominar a las personas. Pero al principio, éramos uno: una sola humanidad, una sola familia. Hoy, el deseo de poder y acumulación nos ha llevado a la separación y al desplazamiento forzado de millones.

En Costa Rica, mi tierra natal, la convergencia de culturas y etnias nos ha dado una riqueza invaluable. Sin embargo, tampoco somos inmunes a las ideas extremistas que siembran xenofobia, racismo y clasismo. Estas ideologías nos alejan de la verdad fundamental: que todos provenimos de la misma fuente.

Como ciudadanos del mundo, es nuestra responsabilidad romper con los prejuicios y cultivar una visión de unidad. Debemos actuar en consecuencia al mundo que deseamos crear, tanto individual como colectivamente. Solo así podremos construir un futuro basado en la paz, la justicia y la conservación de nuestro planeta. Todos Somos Uno.

viernes, 3 de enero de 2025



Una oportunidad a cada instante

Nuestra recompensa por sobrevivir a las Navidades es el inicio de un nuevo año, acompañado de la tradición de los propósitos de año nuevo. Cada enero nos comprometemos con nosotros mismos a cambiar: bajar de peso, dejar hábitos perjudiciales, estudiar algo nuevo, ahorrar dinero, entre otras metas. La idea de un nuevo comienzo es irresistible, una oportunidad para dejar atrás los problemas del último año y avanzar con esperanza. Pero, ¿quién puede realmente determinar cuándo termina lo viejo y empieza lo nuevo? No es una fecha en el calendario, ni un cumpleaños, ni siquiera la llegada del año nuevo. Es un suceso, grande o pequeño, que nos transforma.

En mi caso, he vivido una existencia intensa. A mis 63 años, siento que he acumulado la experiencia de más de un siglo. Mis vivencias han sido variadas y profundas. Algunas estuvieron marcadas por la angustia, pero cada una de ellas me enseñó, me permitió crecer y esculpió al ser humano que soy hoy. La vida, en su inagotable complejidad, siempre ofrece una nueva oportunidad, un comienzo diferente. Lo ideal es que estos cambios nos llenen de esperanza y nos inviten a ver el mundo con una perspectiva renovada, dejando atrás viejos hábitos y recuerdos que ya no nos sirven.

Sin embargo, en medio de este frenesí por el cambio, es importante reconocer que hay cosas que valen la pena conservar. Vivir cada día como si fuera el último, enfocándonos en el aquí y el ahora, nos permitiría experimentar la vida en su plenitud. Este enfoque consciente, guiado por nuestro ser interior, nos invita a elegir con intención y a vivir verdaderamente.

Recuerdo una de esas tradiciones de mi juventud: el beso de medianoche en Año Nuevo. Ese no era un beso cualquiera. Representaba las esperanzas y el romanticismo acumulados durante todo un año. En esos momentos, las campanas marcaban no solo el inicio de un nuevo ciclo, sino también el peso del año que dejamos atrás: las oportunidades aprovechadas y las que se perdieron. A veces, ese beso llegaba con alegría y euforia; otras, la chica elegía a otro galán, y la noche se teñía de tristeza y desaire. Pero incluso en esos momentos de soledad aprendí algo esencial: vivir cada instante como lo que es, un eterno presente.

Como en el cuento de Alicia, donde "siempre es para siempre", cada momento lleva consigo su esplendor único. Incluso en noches difíciles, cuando me hundía en la autocompasión y el desengaño, entendí que cada experiencia, por dolorosa que fuera, era parte de mi aprendizaje, parte de ese lienzo que vamos tejiendo con los hilos de nuestras vivencias.

Vivir en el ahora, disfrutar de cada experiencia, nos permite apreciar la vida en su esencia: un flujo constante de instantes. Podemos medirla en años, meses, días o horas, pero, en realidad, la vida ocurre en cada latido, en cada respiración. Cada día, cada instante, es una oportunidad para crecer, para vivir, para ser.

 

jueves, 10 de octubre de 2024

La muerte

 





Cuando no quieras sentir la muerte puede parecer un sueño. Pero ver la muerte, verla de verdad, hace que soñar con ella parezca ridículo. Quizás haya un momento, mientras creces cuando todo se revela, en ese instante solo como cuando llegaste a este mundo, con la diferencia de que tendrás tus experiencias, lo vivido, casi como una películas vendrán a ti todos esos momento
En el fondo a todo el mundo le gusta pensar que puede ser fuerte, pero ser fuerte no solamente es ser duro, se trata de asimilarlo. A veces tienes que darte a ti mismo permiso para no ser fuerte por una vez. No tienes que ser duro cada momento del día, está bien bajar la guardia, de hecho, hay momentos en que es lo mejor que podrías hacer, siempre que escojas tus momentos con sabiduría


En ese instante tendrás un gran sentimiento de pérdida y angustia pero la muerte no es el fin es solo otra puerta que se abre en nuestro recorrido por la existencia, Es interesante cómo nuestras creencias pueden dar forma a nuestra percepción de la muerte y de la vida en general. La idea de que la muerte es parte de un proceso continuo en nuestra existencia puede ser reconfortante y ofrecer una forma de encontrar significado y tranquilidad en la vida, Apreciar cada momento y encontrar la belleza en las pequeñas cosas puede hacer que la vida sea más rica y significativa. El deseo de crecer y mejorar constantemente, así como de valorar y honrar la vida que se nos ha dado, puede ser una fuente poderosa de motivación y propósito. Amar y ser amado, experimentar el amor en sus diferentes dimensiones, ver los diferentes rostros de Dios en cada ser a nuestro lado, Mantener una conexión positiva con los demás y con el mundo que nos rodea puede traer una gran satisfacción y plenitud a la vida, lo veo en cada movimiento del universo, a pesar de todo lo terrible que pueda ser el mundo toda vía es un bello lugar, el sol sale para todos por igual, la lluvia refresca mi cara, el aire hincha mis pulmones, la vida se abre camino de entre las cenizas y siempre la luz vence la oscuridad, La muerte es un tema profundo que ha intrigado a la humanidad a lo largo de la historia. quiero enfocar el tema no como algo terrible y oscuro, más bien como una bifurcación en nuestra existencia, una transición en nuestra existencia puede cambiar nuestra forma de relacionarnos con ella y con la vida en general, pienso que si tuviéramos presente que en cualquier momento tenemos que dar ese paso y ser besados por la parca aprovecharíamos cada instante en esta dimensión , trataríamos felices siempre, darle sentido a la experiencia de la vida, de tal forma que cuando llegue ese momento estemos satisfechos con lo logrado, el dejar una huella digna de seguir, un mejor planeta para los que nos relevan



Mantener la conciencia de nuestra propia mortalidad puede ser un recordatorio poderoso de la importancia de vivir plenamente y de manera significativa en el presente todo cambio verdadero empieza por uno mismo, ser compasivo, solidario realizar cuanto acto de bondad esté a nuestro alcance , respetar la vida en todas sus manifestaciones ser mejores humanos en resumen Ser compasivos, solidarios y buscar ser mejores personas cada día son formas poderosas de vivir una vida significativa y dejar una huella positiva en el mundo

No Eres El Ego !

 





"No eres el ego; así que, cuando descubres el ego en ti, eso no significa que has encontrado quién eres, sino que has encontrado lo que no eres. Y es a través del conocimiento de lo que no eres que puedes acercarte a descubrir ¿Quién eres en realidad? —Eckhart Tolle.

Desde la perspectiva metafísica, el ego es simplemente una creencia. Aunque parece tener una existencia propia, en realidad es una ilusión que nos hace creer que estamos separados del Todo. El ego, o lo que llamamos “yo falso”, es un sustituto engañoso de nuestra verdadera identidad. Suele inundarnos con pensamientos de muerte, separación, escasez y pérdida, creando una necesidad constante de autoafirmación.

Una de las primeras trampas es creer que el ego representa nuestra verdadera identidad. El ego no es más que una confusión acerca de quiénes somos en realidad. Es un falso sustituto de nuestra verdadera esencia, a menudo tratando de silenciar la voz de la conciencia mediante pensamientos centrados en "muerte, separación, escasez y pérdida", y una constante necesidad de satisfacerse a sí mismo. El ego controla nuestros pensamientos, sentimientos y creencias, y algunos afirman que es una inmensa prisión que hemos construido para nosotros mismos.

Mientras que lo verdadero es eterno, el ego nos aterroriza con el concepto de muerte, alejándonos de nuestra esencia eterna. Aunque debemos cuidar nuestro cuerpo, el miedo a la muerte es una distracción del ego que nos impide reconocer nuestra verdadera inmortalidad. Jesús nos recuerda que la vida continúa más allá de la muerte: “Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.”

El ego también alimenta la creencia en la pérdida. Según "Un Curso de Milagros", "Nada Real puede ser amenazado, Nada Irreal existe. En esto radica la Paz de Dios". La ley de dar y recibir demuestra que, al dar, también recibimos. Al entregarnos a los demás con bondad, compasión, perdón, paz y amor verdadero, no sufrimos pérdida alguna. Aunque mantenemos una lealtad al ego, que nos lleva a una relación constante de dar y recibir lo efímero y perecedero, dentro de nosotros hay una voz que nos dice: no tengas miedo, solo confía, pues el universo está dispuesto para tu crecimiento y felicidad. . Esa voz es lo que llamo conciencia.

El perdón, junto con la bondad y la compasión, son prácticas que nos conectan con nuestra conciencia, con la voz de Dios en nuestro interior, nuestro Ser Verdadero. Perdonarnos libera de la influencia del ego y nos acerca a la verdad. Esta idea resulta inaceptable para el ego, que justifica la venganza bajo la apariencia de justicia. El mundo ha creado una imagen de Dios como un ser justo, vengativo y castigador, como si Dios tuviese el ego más grande del universo. Sin embargo, Dios es esencialmente Amor. El amor es paciente, bondadoso, no envidia ni se jacta, no se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, y no guarda rencor. El amor no se regocija en la maldad, sino en la verdad. Todo lo disculpa, cree, espera y soporta.

Voltaire dijo: "Dios creó al hombre a Su propia imagen y luego el hombre le devolvió el cumplido". El Dios que creamos es realmente la imagen de nuestro propio ego.

El juicio es uno de los pensamientos que engrandece al ego. El ego constantemente juzga a los demás ya nosotros mismos, manteniéndonos en debates sobre lo bueno y lo malo, lo racional y lo irracional, la locura y la cordura. El ego define y etiqueta todo, y el perdón desde el ego se convierte en condonación. El ego nos mantiene en el odio, la ira y la separación. La idea de vernos como iguales, únicos y creados a imagen del amor es inconcebible para el ego, que perpetúa la separación y nos impide ver a Dios en todo y en todos. Creer que Dios es un ente inalcanzable y distante perpetúa el sentimiento de separación, mientras que la verdad es que Dios está en cada uno de nosotros, y cada uno de nosotros es una expresión única de Dios. Practicar el perdón disuelve esa separación y nos reconecta con la fuente de todo.

En la mente de Dios no existe la carencia, la muerte, la separación o la pérdida. Todos estos pensamientos y creencias han sido plantados por nuestro ego y el ego colectivo. Jesús dice: "Miren las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No son ustedes de mucho más valor que ellas?" Todo el universo está diseñado para nuestro crecimiento y felicidad, pero el ego ha implantado la idea de carencia, llevándonos a competir y ver a cada ser como un enemigo a vencer.

El ego establece un ciclo de culpa y ataque: cuanto más culpables nos sentimos, mayor es nuestra necesidad de negar nuestra culpa y atacar a los demás. Este ciclo perpetúa la culpa y el conflicto. La verdadera solución es el amor. En un mundo lleno de violencia y odio, es esencial que nuestra luz interior se extienda a todos los aspectos de nuestras vidas. Al elegir el amor sobre el ego y practicar el perdón, podemos contribuir a una resolución más pacífica y justa en nuestras comunidades.

El verdadero objetivo de la justicia es buscar el bienestar común y restablecer el orden en la sociedad. Su propósito es corregir daños o injusticias mediante procedimientos equitativos, respetando las leyes y derechos de todas las partes involucradas. La violencia, el odio y la ira no resuelven los conflictos; solo el amor, con el perdón como primer paso, puede ofrecer una solución efectiva. 

Sueños Rotos









Como los niños que traen sus juguetes rotos llorando para que los arreglemos, yo le llevé mis sueños rotos a Dios, porque Él era mi amigo. Pero en lugar de dejarlo en paz para que trabajara a su ritmo, me quedé cerca e intenté ayudar a mi manera. Finalmente, se los arrebaté y grité: “¿Cómo puedes ser tan lento?” “Hijo mío”, respondió Él, “¿qué podía hacer? No les diste alas en ningún momento.”

Cuando era pequeño, me preguntaba si Dios sabía que existía, si escuchaba mis oraciones, cómo podía estar en todas partes. En ese entonces, la respuesta siempre era: “Eso es uno de los misterios de Dios.” Hoy, muchas de mis preguntas de infancia y juventud han encontrado respuestas. Aunque ya no me preocupa tanto este tipo de cuestiones y me concentro más en afirmar el amor en mí, a veces deseamos que Dios haga nuestra voluntad en lugar de nosotros hacer la suya. Este deseo del ego de tener la razón nos lleva a pensar que sabemos lo que es mejor para nosotros. Luchamos contra la voluntad de la fuente, empeñándonos en ir en contra de la energía que mueve el universo en lugar de fluir con ella.

Por ejemplo, los viajes espaciales requieren una gran cantidad de energía porque luchan contra la gravedad. Los científicos están estudiando la posibilidad de aprovechar estas fuerzas en lugar de enfrentarse a ellas. De hecho, el gobierno de Estados Unidos ofrece grandes sumas de dinero a quien resuelva este problema.

Durante mucho tiempo, hemos mirado en la dirección equivocada, creyendo que la felicidad está en las cosas materiales, en otras personas, en ascender en la sociedad, o en lograr estatus académico. Recientemente, un hombre se presentó en mi trabajo y me dijo: “Tengo 50 años, hablo cuatro idiomas, he viajado por el mundo, tengo una maestría, y siento un gran vacío en mi vida.”

Esto ilustra que vivimos en contra del propósito con el que fuimos diseñados. Nacimos para experimentar el amor y la verdadera felicidad, pero pensamos que los logros externos nos darán felicidad. En realidad, es al revés: soy feliz, y a partir de esa felicidad, puedo cumplir mis sueños. Si no los cumplo, sigo siendo feliz, pues entiendo que mi estancia en este mundo es temporal, pero la verdadera felicidad es eterna. Hemos mirado hacia afuera en lugar de dentro, donde construimos nuestro mundo y experimentamos el amor. Dios nos habla a través de la conciencia, y cuando alguien nos habla, es otro yo, porque Dios está en todo y en todos.

Lo que parece importante por la mañana, por la noche a menudo pierde sentido. Esto se aplica a todos los aspectos de este mundo físico. Por la mañana, corremos para no llegar tarde al trabajo o al estudio, y eso nos parece crucial. Nos invade la angustia y la impaciencia, y después de sufrir y afectar a los demás con nuestra falta de paz, al final del día, ni siquiera recordamos nuestra premura. Lo mismo ocurre con nuestra existencia física: cuando somos jóvenes, queremos hacerlo todo, comer de todo, acumular bienes y títulos. Perdemos la salud buscando dinero, y luego perdemos el dinero tratando de recuperar la salud.

Creo que debemos ir despacio y apreciar la vida. El propósito de la vida es vivir y ser feliz. En la simpleza de las cosas se encuentra la grandeza de la vida. Cada pequeño movimiento tiene la energía de la Fuente. Los milagros no siempre tienen que ser espectaculares; tú eres un milagro, la lluvia es un milagro, y el hecho de que alguien se ocupe de ti también lo es. Incluso los tiranos sienten amor. La infinita gama de posibilidades que Dios nos da para practicar el amor verdadero es maravillosa
 

La Tienda de la Vida





Imagina que al nacer, se te entrega un millón de dólares, libre de impuestos, como un regalo para tu vida. Este dinero representa tu espíritu, tu capacidad de amor y todas las experiencias que puedes adquirir a lo largo de tu camino. Con esa fortuna, entras a una vasta tienda, donde cada rincón está lleno de oportunidades y elecciones.


Al principio, todo parece tentador. Te encuentras con cortinas de colores brillantes, pero al acercarte, te das cuenta de que son horribles y de mal gusto. Sin embargo, decides comprarlas por diez mil dólares. Sientes que estás tomando una decisión, aunque en el fondo sabes que no es lo que realmente deseas.

Luego, pasas a la sección de automóviles. Allí, encuentras un coche que no funciona, en pésimas condiciones, y decides adquirirlo. Te convencen las promesas de que, con el tiempo, podrás arreglarlo. Sigues adelante, gastando tus recursos en cosas que no te brindan satisfacción ni felicidad.

En la siguiente tienda, te sientas a comer en un restaurante donde te sirven una comida mal preparada y fría. Aun así, pagas sin cuestionar, pensando que es lo que mereces. Con cada compra, tu corazón se va llenando de cosas que te dañan: rencores, miedos, celos y angustia.

Al final de tu vida, al revisar lo que has acumulado, te das cuenta de que has desperdiciado tu millón de dólares en objetos y experiencias que no solo no te han hecho feliz, sino que te han estancado. Mirando a tu alrededor, sientes un profundo vacío y una tristeza, al darte cuenta de que podrías haber elegido de otra manera.

Esta experiencia se convierte en una lección crucial: así como en la tienda de la vida, cada emoción que eliges cultivar en tu corazón tiene un precio. El odio, la ira y el resentimiento solo te roban tu esencia y tu energía. Pero también hay opciones valiosas: amor, compasión, paz y alegría. Estas son las verdaderas inversiones que enriquecen tu ser y alimentan tu espíritu.

La próxima vez que entres en esa tienda de la vida, recuerda que tienes el poder de elegir. Pregúntate: ¿realmente quiero esto? ¿Cómo puedo llenar mi corazón de cosas que me nutran y me hagan crecer? Así, aprenderás a invertir sabiamente en tu propio bienestar y en el de los demás

El sendero




He caminado por este sendero,
con los pies descalzos,
sentido el frío de la noche y el ardor del sol.
Años han pasado como el viento que mueve las hojas,
y, en algún momento, me he detenido a mirar,
como un pájaro que contempla el río desde el aire,
preguntándome cuál es su curso,
hacia dónde lleva sus aguas.

La juventud, como una fragancia,
se ha desvanecido del jardín,
y ahora el alma suspira por el descanso,
por la paz que solo la verdad otorga.
Recuerdo los días de mi infancia,
las sonrisas de aquellos que moldearon mi ser,
los colores que pintaron mi horizonte,
como un sol dorado que cae en el ocaso.

El ritmo vertiginoso de la vida se ha desacelerado,
y me siento en la orilla del tiempo,
viendo cómo las olas llegan,
una tras otra,
llevándose consigo la arena de los años.
Y me pregunto: ¿Cuál es el propósito de todo esto?
¿Por qué el dolor y la alegría danzan juntos en mi corazón?

A veces, el dolor se sienta a mi lado,
como un viejo amigo no deseado,
y me cuenta historias de días pasados,
de lágrimas derramadas en noches silenciosas.
Me he visto atrapado en la telaraña de la soledad,
envolviéndome con suavidad,
hasta que mi corazón ha gemido,
como un pájaro enjaulado que anhela el vuelo.

Pero he muerto y renacido mil veces,
cada amanecer es un susurro de amor divino,
una promesa de resurrección.
En cada mirada, en cada gesto,
he visto a los ángeles sonreírme,
y también he sentido el rugido de los demonios,
cuando el ego ha inflamado mi pecho.
Ambos, el ángel y el demonio,
son espejos de mi propio ser,
reflejando las facetas del alma en su búsqueda.

Y ahora, en mi despertar,
he dejado de buscar afuera.
El viaje es hacia adentro,
donde el misterio susurra y la verdad descansa.
Soy un libro que aún escribe sus páginas,
cada día una nueva historia,
cada momento una lección,
cada respiración, un recordatorio
de que la vida es un regreso al Amor

"Cocodrilos, Desinformación y Ecosistemas: Una Reflexión Sobre el Equilibrio y el Sensacionalismo"




En tiempos de crisis climática, los animales no solo enfrentan la destrucción de sus hábitats, sino también el juicio erróneo de la opinión pública. La reciente situación en Costa Rica, donde se sugirió erróneamente que un cocodrilo fue responsable de una tragedia, ha puesto de relieve los efectos del sensacionalismo y la desinformación, en dicha información se hace entender que el oficial muere por causa del ataque de un cocodrilo cuando en realidad muere ahogado, el hecho se dio a principios de este mes, pero la noticia cobra vida en estos días, en que ha habido varios avistamientos de cocodrilos en playas y zonas cercanas a los habitas de estos animales, me parece importante dar algo de contexto sombre la situación.

En tiempos de crisis climática, los animales no solo enfrentan la destrucción de sus hábitats, sino también el juicio erróneo de la opinión pública. La reciente situación en Costa Rica, donde se sugirió erróneamente que un cocodrilo fue responsable de una tragedia, ha puesto de relieve los efectos del sensacionalismo y la desinformación.

Cuando la verdad es eclipsada por el amarillismo, no solo se perjudica la percepción pública, sino que también se amenaza la preservación de especies clave. En el reciente caso del guarda parque fallecido, muchos titulares omitieron hechos importantes, contribuyendo a una narrativa de miedo hacia los cocodrilos
Lo primero es el tema de la situación climática que vivimos, Costa Rica y otros países están siendo afectados por el fenómeno de El Niño, este fenómeno ocurre cuando Sucede cuando la temperatura superficial del mar del océano Pacífico ecuatorial se enfría por debajo del promedio (-0.5 grados Celsius). A esto se le agrega los factores de cambio climático y calentamiento global, su desarrollo e intensidad tienen la capacidad de cambiar el clima en la atmósfera y provocar desastres naturales, como inundaciones, sequía, incendios, deslizamientos de tierra, entre otros.

A esta situación le sumamos, la invasión de sus territorios, por los humanos, Actualmente, la destrucción o modificación de hábitats naturales es la principal amenaza a la cual están sometidos las poblaciones de cocodrilitos, los desarrollos urbanísticos y hoteleros, la expansión de los territorios de la actividad agrícola y ganadera, favorecen el desplazamiento de los cocodrilos a otras zonas como playas y zonas pobladas.
Pero para que son útiles los cocodrilos? Según estudios hechos por las universidades UCR Y UNA, los cocodrilos en su papel como depredadores clímax, contribuyen al equilibrio de las redes tróficas en ecosistemas acuáticos y promueven la riqueza biológica en ellos.
Además, estos reptiles favorecen el reciclaje de materiales y nutrientes en esos sistemas de muchas maneras. Al ser animales grandes, relativamente conspicuos, pueden ser monitoreados y empleados como especies indicadoras.
De hecho, algunos investigadores los han sugerido como especies centinela, que podrían utilizarse al ser susceptibles o estar más expuestos a peligros, como contaminación o cambios en el ecosistema acuático.

La rápida recuperación de sus poblaciones permite emplearlos también para evaluar las medidas de conservación y protección ambiental en una localidad o región.
Pero, quizás su rol más evidente es el de servir de atracción a la industria turística. El cocodrilo, sin duda, es una de las especies más buscadas por los miles de turistas que año a año visitan nuestro entorno natural, por lo que contribuyen a la economía nacional y local.
El mejor ejemplo de ello se observa en todo el comercio asociado al tema cocodrilo. Que se ha generado en los alrededores del puente sobre el río Tárcoles o en el pueblo del mismo nombre, donde el avistamiento de cocodrilos es una de las actividades que más réditos económicos produce.

Aunque estos reptiles siempre han estado en nuestro medio y se debe respetar su hábitat, hay quienes piensan que hay que reducir su población. Bien se sabe que somos las personas que hemos invadido su hábitat, lo que hace que se desplacen a otras zonas e incluso a centros de población donde a menudo se deben reubicar.
Según los internautas y grupos en redes sociales existe una sobrepoblación de cocodrilos, debido a la ley de conservación de vida silvestre emitida en los años 60, que prohibió su caza, ya que la cacería llevó la especie al borde de la extinción.

La percepción de la gente es que existe sobrepoblación, pero la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) tiene al como una especie con poblaciones vulnerables. En el caso de nuestro país existen escasos estudios que determinen la cantidad de reptiles por kilómetro cuadrado y su capacidad de alimentación en estos espacios.
Por otra parte, esta los tours donde se llevan a turistas ver cocodrilos y incluso se permite la alimentación de estos, son factores que hacen que estos reptiles busquen involucrarse más con el ser humano.

Actualmente, la destrucción o modificación de hábitats naturales es la principal amenaza a la cual están sometidas las poblaciones de cocodrilitos. La protección de hábitats acuáticos como humedales, determinará en gran medida el futuro de la conservación de cocodrilos

Los cocodrilos son depredadores tope de la cadena alimenticia y evidentemente las personas no saben las consecuencias ecológicas que genera la eliminación de un depredador tope en los ecosistemas.
La verdadera solución a estos conflictos no reside en cazar animales, sino en educar a las comunidades sobre la importancia de coexistir con la fauna. La educación ambiental debe ser nuestro faro, iluminando el camino hacia una convivencia más armónica con el entorno

Al final del día, los cocodrilos y otros animales desplazados no son nuestros enemigos. Son víctimas de un entorno cambiante al igual que nosotros. Depende de cada uno de nosotros decidir si seremos parte del problema o de la solución

Amor más allá de la Tolerancia

 











"En estos tiempos de conflicto, especialmente cuando miramos a regiones como Medio Oriente, es fácil caer en el ciclo del juicio y la intolerancia. Sin embargo, es en estos momentos cuando más necesitamos recordar que el amor verdadero es la única respuesta que puede traer paz y sanar las heridas de la humanidad. Quiero compartir una reflexión personal que escribí hace un tiempo, con la esperanza de que resuene en los corazones de aquellos que buscan una solución más profunda, más allá de la violencia y el odio."


Hace un tiempo, me encontré investigando sobre una corriente religiosa que ha ganado cierto auge en los últimos años. Comencé mi búsqueda leyendo un artículo sobre la tolerancia religiosa, con el firme propósito de mantenerme objetivo e imparcial. Conversé con algunas personas para ampliar mi perspectiva y pronto me vi reflexionando sobre lo que realmente significa tolerar las creencias ajenas.
La definición común de tolerancia religiosa dice: “La tolerancia religiosa significa respetar y aceptar la existencia de otras formas de vida, creencias e ideas, o incluso la no creencia en ninguna religión”.


En este mundo tan diverso y plural, la verdadera tolerancia exige que individuos e instituciones reconozcan esta diversidad y se abstengan de imponer sus dogmas más allá de su comunidad de fe. Cada sistema de creencias tiene su lugar y su validez para quienes lo practican, pero no debe ser utilizado para controlar o influir en quienes no comparten esa visión.
Mientras meditaba sobre esto, me dije a mí mismo: "¿Estoy siendo prejuicioso?" Y fue entonces cuando algo en mi interior respondió: "El juicio es una distracción". Una distracción que nos aleja del verdadero propósito que nos une como seres humanos, como hijos de Dios: el amor. No es el juicio lo que nos guía, sino el amor verdadero, aquel que no busca imponer, sino comprender, aquel que respeta sin esperar nada a cambio.


Me resulta fascinante cómo la Declaración Universal de los Derechos Humanos establece con claridad que toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión. Este derecho incluye la libertad de cambiar de creencias y de manifestar su religión de manera individual o colectiva, ya sea en público o en privado. Sin embargo, creo que este concepto de tolerancia se queda corto. No es suficiente simplemente aceptar la existencia de otras creencias; debemos ir más allá.
Más que la tolerancia, es el amor lo que realmente puede transformar nuestras vidas y las de quienes nos rodean. El amor no busca imponerse ni controlar; no se limita a aceptar diferencias, sino que las abraza. Es la prueba más pura de nuestra naturaleza divina. Al final, lo importante no es si colocamos la cama de un lado o del otro, ni si creemos que el aroma de una flor puede curar. Tampoco importa si nos consideramos profetas, apóstoles, chamanes o gurús. Lo único que trasciende es el amor.

Al recordar las palabras de un antiguo texto, resuena en mi corazón:
"Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, pero no tengo amor, soy como metal que resuena o címbalo que retiñe. Y si tuviera el don de profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, pero no tengo amor, nada soy. El amor es paciente, bondadoso; no tiene envidia, ni se jacta, ni es arrogante. No busca lo suyo, no se irrita, ni toma en cuenta el mal recibido. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser".

Al leer estas palabras por primera vez, me prometí que mi religión sería el Amor Verdadero. Mi objetivo en la vida sería aprender a amar en su sentido más profundo. Hoy comparto contigo esta reflexión para que, al igual que yo, no te distraigas. A menudo me doy cuenta de que, incluso con las mejores intenciones, me pierdo en trivialidades. Soy ese metal que resuena sin propósito, porque, en el fondo, lo que realmente nos hace vivir y ser es el Amor, y Dios es Amor, sin importar el nombre que le demos.

Vivimos en un mundo lleno de distracciones, de entretenimientos que nos roban la paz y nos hacen perder de vista lo que verdaderamente importa: ser felices y vivir en amor. Nos olvidamos de que nuestra meta principal en este viaje es unirnos en esa energía divina que es el Amor, que todo lo abarca y todo lo transforma.

He visto a la gente buena mirar hacia atrás y estar satisfecha de estar en el camino.

 







No sé si te ocurre lo mismo, pero al mirar en retrospectiva, noto cómo las personas entran y salen de nuestras vidas, siempre dejando una huella, una mezcla de luz y sombras. Algunos han partido de este plano físico, otros se han desvanecido en el tiempo, y algunos aún permanecen cerca. Pero la mayoría ha influido en nuestro crecimiento: nuestros maestros, nuestra familia, los amigos, las
parejas, incluso escritores, políticos, actores o músicos. Todos, de alguna manera, nos recuerdan cuál es nuestro camino.


Son personas que han escrito sus iniciales con amor en el libro de mi vida. Al mirar atrás, pienso en el peregrinaje que es vivir: un viaje solo de ida, siempre hacia adelante, aunque a veces parezca que retrocedemos. Pero hoy no quiero hablar de retrocesos; quiero compartirte el milagro y la belleza de Dios que se refleja en cada uno de nosotros. Somos espejos del amor divino, aunque a veces empañados por nuestros egos. Te invito a detenerte y observar a tu alrededor: en tu familia, tu comunidad, tu lugar de trabajo. Si miras con atención, encontrarás a los que llamo Santos Urbanos, la sal y la luz del mundo.


Uno de ellos es Dobri Dobrev, un anciano búlgaro de 98 años que perdió la audición en la Segunda Guerra Mundial. Cada día camina 10 kilómetros hasta Sofía, donde pide limosna. Lo que pocos saben es que ha donado hasta el último centavo, más de 40.000 euros, a orfanatos y servicios sociales, mientras él vive de una pensión estatal de 80 euros.

Otro ejemplo es Rigo, un hombre de mi comunidad que, tras perder a su esposa hace 25 años, ha cuidado solo de sus tres hijos, todos con discapacidades severas. Hoy, sus hijos tienen entre 40 y 50 años, y él, con 75, sigue levantándose cada mañana con una sonrisa, bañando y alimentando a sus hijos antes de ir a trabajar. Sus compañeros aseguran que nunca lo han visto enojarse.

Y luego está el chofer de autobús de mi ruta, quien después de un largo día de trabajo nos regalaba risas y alegría, haciendo que el viaje rutinario se sintiera como un tour por París. A pesar del cansancio, lograba que nadie quisiera bajarse del autobús.
He visto a la gente buena mirar hacia atrás y estar satisfecha de estar en el camino. En el camino del Amor.

miércoles, 11 de octubre de 2023

Generaciones enteras vivirán por lo que ha hecho

 



En el otoño de mi vida, me siento un escéptico. Y en cierto modo lo soy. El lobo nunca dormirá en la misma cama con el cordero. Pero de algo estoy seguro: si conseguimos que una generación, una sola generación, crezca libre en el mundo, ya nadie les podrá arrancar nunca la libertad. Nadie les podrá robar ese tesoro.
Libre para elegir el camino a tomar, dicha elección debe ser tomada desde la consciencia, desde nuestro ser interior pues todo cambio es verdadero si se hace desde dentro.
Los miembros de esta generación tendremos que lamentarnos no solo por las palabras y los actos odiosos de las malas personas, sino por los clamorosos silencios de las buenas. Si ves en las redes sociales circulan publicaciones exaltando lo especiales que somos la Generación X, algunos diciendo que la generación Y, Y LA Z son la pesificación de la especie humana, cada uno de nosotros somos responsables de la situación actual en ello se aplica la ley de siembra y cosecha estamos recogiendo la cosecha de lo que hemos sembrado.
Actualmente, dentro de la población activa se distingue entre: ‘baby boomers’, generación X, generación Y o ‘millennials’, y generación Z o ‘centennials’. 'Baby boomers' (1946-1964) Generación X (1965-1980) 'Millennials' o generación Y (1981-1996): ‘Centennials’ o generación Z (1997-2010), mi pregunta está en ¿Quién determina donde comienza una generación y empieza otra?
Vemos como la generación actúa se hunde en la distracción de los móviles, perdiendo el tiempo en videos sin ningún contenido, en cuanto a la música vemos como un genero en especial se ha proliferado su ritmo de bajo contenido con letras que rayan en lo vulgar y ofensivo, el cine se centra mas en los efectos y contenido superficial, las expresiones escritas del arte la literatura y la poesía han sido relegadas a un ultimo plano, mientras que el desarrollo de la consciencia, la espiritualidad sustituidas por una “religión Little” todos quieren ser youtuber, algunos se hacen llamar influencer pero que tipo de influencia son las redes sociales, cuando estas aparecieron pensé que serían un gran avance en las comunicaciones una oportunidad para derribar no solo las barreras físicas sino también las culturales e ideológicas.

Como alguien dijo el problema no es el entretenimiento ni la tecnología es el uso o abuso que se le da a estos pienso que lo justo es lo correcto, sabiduría está en el equilibrio. Cada generación establece sus propios valores y estos cambian con el tiempo, vemos un mundo donde se ha impuesto una cultura sexuada, de todo fácil y rápido intolerante e insensible nos hemos acostumbrado a ver el dolor humano como algo cotidiano y de nuevo me surge la interrogante ¿cuánto de todo esto es nuestra responsabilidad como generación relevada?

Si bien la mayoría de gente en este mundo se encuentra distraída, todavía hay esperanza, somos una minoría y las buenas noticias y las buenas acciones no son las atraen la atención de las mayorías hay quienes dedican sus vidas al servicio a los demás, quienes cuidad y protegen la creación quienes te valoran por lo que eres y por como te ves, mi preocupación como parte de la generación que se va es que clase de mundo estamos creando, que tipo de ser humano habitara la décadas venideras, será una tipo de persona que no distingue le realidad de la ficción, seres que estén mas preocupados por como se ven o que tan grande tengan el trasero o su pene que le estamos transmitiendo a nuestros hijos y nietos?
La primera manifestación de la expresión humana es su cuerpo el cuerpo posee su propio significado. El cuerpo refleja nuestras pretensiones y nuestras esperanzas. Comunica nuestra intimidad al mundo exterior. Por eso cada época, cada generación, exhibe una fisonomía única. Entenderán cual es la diferencia de entre amor y sexo, que el cuerpo es solo un vehículo para desplazarse en este mundo material si bien nuestra generación será recordada como única por todos sus logros, seremos recordados como la generación que fallo en el proceso de relevo.
Con este articulo no quiero juzgar a nadie en particular pues cada uno de nosotros somos responsables de nuestras elecciones y cada uno tiene su propia realidad la cual no es de mi conociendo repito no estoy en contra de los avances tecnológicos, debemos rescatar y apoyar valores y principios que nos permitan avanzar como especie y todo ello solo es posible si este cambio lo hacemos desde el interior teniendo el Amor como guía e instrumento de nuestras acciones 

El Cosmos


 Desde que era un chaval, el universo cautivó mi atención el asombro casi que se convirtió en mi estado permanente, cientos de preguntas inundaban mis pensamientos buscando una explicación frente al Cosmos que expandía frente a mis ojos, la vida que se mi presentaba con sus diferentes matices y el infinito mar de posibilidades, los infinitos caminos a recorrer, lo inconmensurable de la vida misma, cuando eres muy joven y tienes una gran sed de saber la vida te parece maravillosa. Tienes esa prisa por descifrarlo todo, recuerdo que cuanto artefacto caía en mis manos era desmantelado, busca entender su funcionamiento, me colocaba en mi orilla del océano cósmico a observar las estrellas por la noche y escuchar los sonidos de la vida acurrucado en mi cama, también trataba de entender la naturaleza de la humanidad porqué muchos teníamos tanto de poco y pocos lo tienen todo, la razón de lo difícil que se nos hace comunicarnos entre nosotros y el tener un dialogo sincero con nosotros mismos.

Existen muchas preguntas aun sin contestar después de varias décadas en este planeta pero a través del curso de mi vida he logrado entender algunas respuestas, continuo tratando de elaborar las mías, de establecer mis valores y principios que son quienes me guían en este recorrido y en lo posible trato de serme fiel a mismo, de no embarrialar mi camino, o perder el rumbo que me propuse transitar para alcanzar mi propósito.
En términos espirituales, el Cosmos se refiere al universo en su totalidad, incluyendo todos los planos de existencia y dimensiones, así como todas las energías, fuerzas y entidades que lo componen. El Cosmos se percibe como una manifestación sagrada y divina que abarca todo lo que existe, tanto visible como invisible. En resumen, el Cosmos en términos espirituales se refiere al universo como una manifestación sagrada, interconectada y llena de significado, que abarca todo lo que existe tanto a nivel físico como metafísico.
Para muchas tradiciones espirituales, el Cosmos es considerado un reflejo del orden y la inteligencia cósmica, a menudo asociada con la divinidad o el principio supremo. Se cree que el Cosmos es una expresión de la conciencia universal y que cada ser humano es una parte intrínseca e interconectada de este vasto tejido cósmico.
Hay cosas en el universo que se escapan a la comprensión humana, pero eso no ha impedido que como especie continuemos en la exploración de nuestro universo tanto externo como interno, hoy más que nunca la humanidad está necesitada de esa introspección y ese vivir en el asombro, nos hemos vuelto una especie ligera el mundo nos hacer cada vez más superficiales, lo gimnasios abarrotados y las bibliotecas vacías, una sociedad cada vez más distanciada y distraída sumergidos en los dispositivos, sumergidos en los videos sin contenido, cada vez más.
Cosmos el término proviene del griego "kosmos", que significa "orden" o "mundo". Creo que nuestro universo se construye a partir de nuestros pensamientos y acciones, nos encimamos en nuestra microscópica parcela de este vasto océano y nos sentimos imponentes sin tomar en cuenta que tan solo somos un átomo que habita en un pixel en este infinito lienzo que ha trazado eso que llamo la fuente de donde todo proviene, el que creador de este cosmos, Único, Eterno e Incambiable, quien nos ha dibujado a su imagen y semejanza, este Cosmos es una expresión visible de su diseñador, creo que con la contemplación, la introspección y la oración se puede conectar con la esencia del cosmos, pero todo ello debe tener un efecto visible en nuestra vida diaria pues como es dentro es fura, las personas somos una expresión de la sociedad y viceversa.

Tenemos la costumbre de quejarnos, de exigir derechos de esperar que el universo sea como queremos y no como es, pero que hacemos para hacer de este mundo un mejor lugar para todos?... cumplimos con nuestros deberes tanto como exigimos derechos, en mi tierra hay dicho que reza;” el buen cobrador es mal pagador” olvidamos la Ley de Dar y Recibir, la Ley de la Atracción, Ley de la Unidad: Esta ley sostiene que todo en el Cosmos está interconectado y es parte de una única y vasta realidad. Se cree que todas las formas de vida y energía están intrínsecamente vinculadas, y que lo que le sucede a uno afecta a todos los demás.

la humanidad está experimentando un declive general en términos de inteligencia ?

 Cada generación echa la culpa a la anterior. Y todas sus frustraciones vienen a aporrear tu puerta, Sé que soy un prisionero De todo lo que mis padres guardaban en alta estima. Sé que soy un rehén de todas sus esperanzas y miedos. Solo desearía haber podido decírselo durante sus años de vida. En esta era posmoderna, colmada de redes sociales, donde prácticamente todo está sexuado, los valores y las costumbres han cambiado algunos en forma positiva y otros en decadencia, como hemos cambiado la libertad a por la comodidad, pero ello depende del cristal con que los miremos, algunos piensan que la humanidad cae vertiginosamente, “vamos de bajada” otros dicen que somos mejores, "efecto Fly.nn" otros que la gente de hoy es más tonta.

No hay evidencia sólida ni consenso en la comunidad científica que respalde la idea de que
la humanidad esté experimentando un declive general en términos de inteligencia, habilidades o capacidades. De hecho, en muchos aspectos, la humanidad ha avanzado significativamente en áreas como la tecnología, la medicina, la ciencia y la calidad de vida en las últimas décadas y siglos.

Es difícil ser completamente objetivo e imparcial sobre todo cuando vemos los gimnasios abarrotados y las bibliotecas vacías, los videos vacíos de contenido, como se propagan los grandes negocios de armas, trafico de drogas, trafico de personas, la falta de identidad, ni siquiera algunos han podido definir su sexualidad, el feminismo, la ideología de genero, la discusión sobre si la tierra es plana o redonda, los extraterrestres, la teorías de conspiración, sin mencionar el fanatismo religioso y político.
Siempre he dicho que el bien es silencioso, mas la oscuridad necesita hacerse proselitismo por lo que es importante reconocer que la humanidad también enfrenta desafíos significativos, como el cambio climático, la desigualdad económica, los problemas de salud pública y otros problemas sociales y ambientales. Estos desafíos pueden dar la impresión de un "declive" en ciertos aspectos, pero también son oportunidades para que la sociedad se enfrente a estos problemas y evolucione.
La historia humana ha estado marcada por períodos de avance y desafío, y la capacidad de la humanidad para enfrentar y superar desafíos es una característica distintiva. Además, la colaboración global y los avances en la tecnología pueden ayudar a abordar muchos de los problemas actuales.

En lugar de ver la situación en términos de un declive generalizado, es más útil abordar los problemas y desafíos de manera constructiva y trabajar juntos para encontrar soluciones. La humanidad ha demostrado ser adaptable y capaz de aprender de sus errores a lo largo de la historia, y hay razones para ser optimista acerca del futuro si se abordan estos problemas de manera eficaz y sostenible.
Todo cambio para que sea verdadero debe iniciar dentro de cada uno de nosotros, debemos cultivar en nosotros la paz verdadera, desarrollar la paciencia y la empatía, elaborar nuestros propios valores y creencias ser críticos consigo mismos y con el entorno, mantener una buena relación con los demás y la creación.
En lugar de centrarse en la idea de que las personas son "cada vez más tontas", es más útil considerar cómo las sociedades enfrentan desafíos y cómo se pueden abordar de manera efectiva para promover el desarrollo intelectual y espiritual, el bienestar en general. La educación de calidad, el acceso a la información, la promoción de habilidades críticas y el fomento del pensamiento crítico, la generación de conciencia son elementos clave para el desarrollo intelectual y el progreso de la sociedad.

El Ego


 En términos espirituales, el ego generalmente se refiere a la identificación excesiva con el "yo" individual y a la creencia en la separación y la individualidad. El ego es considerado como una construcción mental que crea una ilusión de separación y es responsable de alimentar el apego, el deseo, el miedo y otras emociones negativas.


Desde una perspectiva espiritual, el objetivo es trascender el ego y experimentar la unidad y la conexión con todo lo que existe. Esto implica reconocer que no somos seres separados, sino parte de una conciencia más amplia y unificadora.

El ego, en este sentido, se ve como una barrera para el crecimiento espiritual y la realización de nuestra verdadera naturaleza. Se considera que el ego limita nuestra capacidad de experimentar la plenitud, la paz y la conexión con el universo.

En muchas tradiciones espirituales, se alienta a trabajar en la disolución del ego a través de prácticas como la meditación, la atención plena y la autorreflexión. Al liberarnos de la identificación excesiva con el yo individual, podemos abrirnos a una comprensión más profunda de la realidad y vivir desde un lugar de amor unidad con todo lo que nos rodea.

Libros para descargar

https://drive.google.com/drive/folders/1oRrbhUM9HGEiOvXu1r1y3gXq7c_T3sdp?usp=drive_link